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A tres meses de la tragedia
Marcha de más de 2 mil personas concluyó en el zócalo de esa ciudad
Derriban una puerta de instalaciones del 41 batallón de infantería en Iguala
Ya no nos queda nada más que seguir en la lucha, dijo un familiar de joven desaparecido
Militares captados dentro de sus instalaciones en Iguala, donde
manifestantes derribaron una de las puertas durante una marcha, a tres
meses de la desaparición de normalistasFoto Ap
Sergio Ocampo Corresponsal Periódico La Jornada Sábado 27 de diciembre de 2014, p. 4
Iguala, Gro.
Al cumplirse tres meses de la desaparición de 43 alumnos de la Normal
de Ayotzinapa, y del asesinato de tres más, estudiantes y maestros
tiraron una de las puertas de la sede del 41 batallón de infantería en
Iguala.
Desde las 11 horas, más de 2 mil personas, entre ellas integrantes de
la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México y de la
Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación, partieron desde
Periférico Norte, donde los jóvenes fueron atacados la noche del 26 de
septiembre por policías municipales de Iguala y supuestos integrantes
del crimen organizado.
Cuando llegaron frente a las instalaciones del 41 batallón de
infantería, que antes se ubicó en Ciudad Altamirano, los padres de
familia que encabezaban la protesta se colocaron a un lado de la puerta
metálica, resguardada por algunos soldados, aunque en el fondo al
parecer había policías antimotines con escudos y toletes.
Los padres empezaron a gritarles
¡asesinos!y
¡regrésennos a nuestros hijos!, mientras golpeaban la puerta con los puños. Algunos, sobre todo las madres, lloraban mientras soldados reían al otro lado de la puerta.
Entonces otros contingentes comenzaron a patear la puerta y a
golpearla con palos; se escucharon tres cohetes que estallaron dentro de
las instalaciones. Hubo confusión que fue aprovechada por estudiantes,
maestros y algunos familiares de los desaparecidos para desprender una
puerta de las instalaciones militares.
Durante los cerca de 20 minutos que duró la protesta, un helicóptero de la Policía Federal sobrevoló la zona militar.
La avanzada de la marcha llamó a los rezagados a que se
reintegraran y continuó el trayecto en el que se sumaron familiares de
los
otros desaparecidos, como se llaman a quienes perdieron a algún pariente en los años recientes, en el contexto de la guerra contra el narco y entre los cárteles de la droga.
En medio de consignas como
¡Peña asesino, te llevaste a nuestros niños!, finalmente llegaron a la plaza de las Tres Garantías, en el zócalo de Iguala.
Allí, Hermenegildo Ortega, tío de Mauricio Ortega, en nombre de los
padres de familia, exigió al Ejército Mexicano que entregue a los
normalistas porque, dijo,
ellos los tienen en sus cuarteles, y a la gente que se encuentra encerrada en sus casas les pedimos que salgan y se manifiesten en las calles, porque a lo mejor algún día, ojalá no, pueden tener un familiar desaparecido.
Entre lágrimas, convocó a los igualtecos a superar el miedo,
como nosotros lo vencimos. Lo que hizo el gobierno con los muchachos no se debe tolerar, si nos dejamos el día de mañana hará lo mismo y nos matará como si fuéramos perros, por eso ya no nos queda nada más que seguir en la lucha, venga lo que venga.
Entre aplausos y consignas, uno de los asistentes expresó:
Jamás nos vamos a rajar, hasta que nuestros hijos se encuentren en nuestros hogares y regresen a la escuela para que eduquen.