martes, 28 de junio de 2016

MÁS APOYO INTERNACIONAL

EL MAESTRO ENSEÑA, APRENDE, 


DIALOGA Y CONVENCE CON LA PALABRA
 ¿Por qué están los maestros mexicanos siendo
encarcelados por protestar contra la Reforma Educativa?
Están resistiendo pacíficamente medidas neoliberales de estilo estadounidense para aplastar a los sindicatos —una columna vertebral de los movimientos por justicia social deMéxico.

Por David Bacon
17 de junio de 2016.

UN MAESTRO DE MICHOACÁN EN PARO SE MANIFIESTA EN LA CIUDAD DE MÉXICO FRENTE A UN CERCO DE POLICÍA.
LOS MAESTROS CANADIENSES Y ESTADOUNIDENSES HAN ORGANIZADO LA COALICIÓN TRINACIONAL PARA DEFENDER
LA EDUCACIÓN PÚBLICA PARA APOYAR LOS ESFUERZOS DE LOS MAESTROS MEXICANOS POR DERROTAR LAS
INICIATIVAS PARA INTRODUCIR UNA EVALUACIÓN ESTANDARIZADA Y ELIMINAR LA ESTABILIDAD LABORAL, QUE HAN
VENIDO DE LA USAID Y DE FUNDACIONES PRIVADAS QUE PROMUEVEN UNA REFORMA EDUCATIVA CORPORATIVA.
(DAVID BACON)
Actualización: El domingo 19 de junio, la policia federal en Oaxaca disparó a maestros y simpatizantes en la
localidad mixteca de Nochixtlán, asesinando al menos a 8 e hiriendo a 30 más. Otro fue asesinado en
Hacienda Blanca, cerca de la ciudad de Oaxaca, de acuerdo al servicio de prensa AIPIN, el cual también
reportó que a las personas se les rehusó la atención en el hospital de Nochixtlán.
El domingo por la noche del 12 de junio, mientras Ruben Nuñez, dirigente del sindicato de maestros de
Oaxaca, estaba dejando una reunión en la ciudad de México, su coche fue rebasado y detenido por varias
camionetas pickup king-cab grandes. Hombres fuertemente armados con ropa de civil lo sacaron y
empujaron a él, a otro maestro, y a un taxista, de su taxi, y luego los condujeron a alta velocidad al
aeropuerto. Nuñez fue inmediatamente trasladado por aire más de mil millas al norte a Hermosillo, Sonora,
y fue arrojado a una prisión federal de alta seguridad.
Apenas horas antes, agentes armados no identificados hicieron lo mismo en la propia Oaxaca, tomando
prisionero a Francisco Villalobos, el segundo dirigente al mando del sindicato, y llevándolo por aire también
a la prisión de Hermosillo. Villalobos fue acusado de haber robado libros de texto un año antes. Los cargos
contra Nuñez todavía se desconocen [al momento de la redacción].
Ambos se unieron a Aciel Sibaja, quién ha estado en el mismo penitenciario desde el 14 de abril. ¿El crimen
de Sibaja? Aceptar cuotas dadas voluntariamente por maestros a lo largo de Oaxaca. La sección 22, el
sindicato de maestros del estado, ha tenido que recolectar cuotas en efectivo desde julio pasado, cuando
las autoridades estatales congelaron no sólo las cuentas de banco del sindicato, sino incluso las personales
de sus dirigentes. Sibaja era responsable de resguardar el dinero que los maestros pagaban
voluntariamente, lo que el gobierno llamó “fondos de fuentes ilícitas”.
Los tres no son los únicos dirigentes del sindicato de Oaxaca en la cárcel. Cuatro más han sido apresados
desde octubre pasado. “Los dirigentes de la sección 22 son rehenes del gobierno federal”, dice Luis
Hernández Navarro, antes maestro y ahora editor de opinión para el diario La jornada de la Ciudad de
México. “Su detención es simultáneamente una advertencia de lo que puede suceder a otros maestros que
sigan rechazando la ‘reforma educativa y una venganza para forzar al movimiento a desmovilizarse”.
Los arrestos son sólo un esfuerzo que el gobierno mexicano ha hecho en recientes meses para detener las
protestas. El 19 de mayo, el Secretario de Educación, Aurelio Nuño Mayer, anunció que iba a cesar a 3 000
maestros de Oaxaca, Guerrero y Michoacán por no haber laborado durante tres días.
Los tres estados son baluarte del movimiento independiente de maestros dentro del Sindicato Nacional de
Trabajadores de la Educación (SNTE): la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE o
“Coordinadora”).
Los maestros de la CNTE han estado parando escuelas desde comienzos de la primavera para detener la
implementación del programa de reforma de la educación del gobierno. Aún cuando los paros en México
son ardorosamente combatidos, no existe precedente para despedir maestros en números tan masivos sólo
por parar.
La noche de los despidos, la policía federal atacó y removió el campamento que los maestros habían
organizado afuera de la Secretaría de Educación de la Ciudad de México. El 11 de junio, la policía en la
ciudad de Oaxaca se movilizó para desmantelar un campamento similar enfrente de la secretaría de
educación del estado. Cuando 500 policías fuertemente armados avanzaron disparando gas lacrimógeno,
las confrontaciones se desbordaron a las calles circundantes, reminiscencia de la manera en que una
huelga similar en el 2006 fue atacada y, luego, brotó por todas partes como una insurrección que duró por
meses.
Una provisión controversial de la reforma educativa del gobierno federal requiere a los maestros el tomar
pruebas para evaluar sus aptitudes. Aquellos que no obtengan buenos puntajes están sujetos a despido.
Este año, cuando el gobierno intentó comenzar a evaluar, los maestros arremetieron en protesta.
En marzo, cuando Nuño intentó dar premios a “maestros excelentes y distinguidos” una de ellos, Lucero
Navarrete, maestra de escuela primaria en Chihuahua, le dijo: “Los resultados pueden depender de muchos
factores y de las circunstancias personales por las que cada uno de nosotros pasa… muchos no obtienen el
resultado que merecen, porque el trabajo que ellos realmente hacen en la escuela es muy diferente de lo
que sale en la prueba”. El periodista Hernández Navarro dice que los educadores tienen una tradición de
equidad y apoyo mutuo, y cree que “no hay maestros de primera, segunda o tercera clase; sólo maestros”.
El 22 de marzo Nuño también anunció una medida que conjuraría el final de las escuelas de capacitación
magisterial del sistema nacional mexicano, llamadas "normales". En lugar de tener que graduarse de una
normal, dijo, cualquiera con un grado universitario en cualquier materia podría ser contratado para enseñar.
Desde la Revolución Mexicana y antes, las normales han sido el vehículo para que los niños de familias
pobres en el campo, y de familias de maestros mismos, se vuelvan educadores capacitados. Al regresar a
las comunidades rurales y de clase trabajadora, los maestros entonces a menudo juegan un rol importante
en el desarrollo de movimientos por la justicia social. Las propias escuelas normales han históricamente
sido semilleros de protesta social y movimientos desafiantes del gobierno.
La escuela normal de Guerrero en Ayotzinapa fue el blanco hace dos años de un ataque que condujo a la
desaparición y posible asesinato de 43 estudiantes, que desde entonces ha erizado a México.
Recientemente una comisión de expertos internacionales criticó al gobierno mexicano por negarse a
cooperar en los esfuerzos por identificar el destino de los estudiantes, y señaló el posible involucramiento de
oficiales de alto rango en su desaparición.
Despedir maestros y desbandar las normales es una meta no tan oculta de la reforma educativa federal. La
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha propugnado por la abolición de las
escuelas normales y ha urgido al presidente Enrique Peña Nieto a despedir a los maestros que obtengan
malos resultados de prueba y a excluirlos de la docencia. Medidas similares han sido defendidas por un
"tanque de pensamiento" (think tank) de Washington, la Asociación por la Revitalización Educativa en las
Américas, un proyecto del Diálogo Interamericano con financiación de la USAID [Agencia de Estados
Unidos para el Desarrollo Internacional, por sus siglas en inglés].
Ambas organizaciones trabajan en cooperación con los cabilderos empresariales de la reforma educativa
mexicana, Mexicanos Primero, organización encabezada por Claudio González Guajardo, miembro de una
de las familias más ricas del país. González dictó a Peña Nieto que "los mexicanos lo eligieron, no el
sindicato [de maestros]", y le dijo que "termine con el poder del sindicato sobre la contratación, la
promoción, el pago y los beneficios para los maestros."
Oaxaca se ha convertido en blanco porque la Sección 22 propuso su propia reforma educativa alternativa
hace más de 6 años, que se concentraba en respetar la cultura indígena y forjar alianzas entre maestros,
estudiantes y sus comunidades (para más sobre las propuestas alternativas de reforma y los ataques del
sector privado a los maestros, véase "La reforma escolar estilo EE.UU. llega al sur"). Tras la insurrección de
2006, el sindicato se volvió la columna vertebral del esfuerzo de la izquierda para derrotar al gobernante
Partido Revolucionario Institucional (PRI), y en 2010 los oaxaqueños por primera vez eligieron un
gobernador no priísta, Gabino Cué. Debiéndoles su elección a los maestros, Cué acordó comenzar a
implementar su reforma en lugar de la federal.
En el 2012, sin embargo, el PRI recuperó el control del gobierno federal. Bajo su presión, Cué renegó de su
compromiso con los maestros de Oaxaca y anunció que implementaría más bien las reformas federales.
Las protestas comenzaron inmediatamente y han escalado desde entonces.
Con la izquierda severamente dividida, el PRI recuperó el control también del gobierno del estado en las
votaciones del 6 de junio. Los arrestos de los dos máximos dirigentes de la sección 22 siguieron en menos
de una semana.
Desde los 1970s, cuando más de 100 maestros fueron asesinados durante los años en que la Coordinadora
fue organizada, la CNTE ha ganado control del sindicato en Oaxaca, Guerrero y Michoacán, y tiene una
fuerte presencia en varios otros estados. Nacionalmente se ha vuelto una importante base de la izquierda
mexicana. Es uno de los más poderosos opositores a la aceptación del gobierno de las políticas de libre
comercio y libre mercado. Debilitar al sindicato y el rol de los maestros en la política es por tanto un
importante objetivo político para González y la élite empresarial de México, así como también el que los
partidos políticos nacionales muevan al país hacia la derecha.
Cuando Hernández Navarro llama a los dirigentes de la sección 22 rehenes, no es ninguna exageración. El
11 de junio, el presidente Peña Nieto anunció que él sólo hablaría con los maestros si ellos aceptaban dos
condiciones. "El gobierno de la República reitera que está dispuesto al diálogo sólo cuando cumplan con
dos condiciones: regresar al trabajo en las escuelas de Chiapas, Guerrero, Michoacán y Oaxaca, y aceptar
la Reforma Educativa".
Tomar de rehenes dirigentes sindicales, despedir a miles, y cerrar una de las instituciones más progresistas
de México son serias violaciones de derechos humanos y laborales, y del estado de derecho mismo. El
apoyo que las reformas amigables con las corporaciones reciben de las instituciones políticas de EE.UU.
hace de la incumbencia de esas instituciones el denunciar también estas violaciones. Es momento de parar
ese apoyo. En su lugar, los maestros en los EE.UU., que están resistiendo reformas similares, deberían
plantarse en solidaridad y ayudar a liberar a sus colegas mexicanos, lo que les daría algún respiro mientras
continúan su lucha.

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DAVID BACON es autor de Los hijos del TLCAN (2004), de la University of California Press, de Personas
ilegales –cómo la globalización crea migración y criminaliza a los migrantes (2008), y de El derecho de
quedarse en casa (2013), los dos últimos de Beacon Press.

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